Los partidos de la oposición argelina, reunidos en Roma,
declaran el 13 de enero de 1995:
Argelia está inmersa hoy día
en una época trágica sin precedentes. El pueblo argelino vive
un clima de terror nunca igualado, agravado por unas condiciones sociales y
económicas intolerables. Las consecuencias de los acontecimientos de
junio de 1991 y del golpe de Estado de enero de 1992, la interrupción
del proceso electoral, la ilegalización del FIS, la instauración
del estado de emergencia y las medidas represivas y las relaciones que han suscitado,
han engendrado una lógica de enfrentamiento. Los riesgos de una guerra
civil son reales, y amenazan la integridad física del pueblo, la unidad
del país y la soberanía nacional. Para la Plataforma de Roma,
sólo una verdadera negociación podrá llevar al país
a una situación pacífica y democrática.
Los participantes se han comprometido bajo la base de un contrato
nacional, los principios del cual son los siguientes y sin la aceptación
de éstos la negociación no será viable:
- La declaración del 1 de noviembre de 1954: la restauración
del Estado argelino soberano, democrático y social bajo el marco de los
principios del Islam (art.1).
- La desestimación del uso de la violencia para acceder o mantenerse
en el poder.
- La desestimación de toda forma de dictadura, tanto en la naturaleza
como en la forma, y el respeto al derecho del pueblo a defender las instituciones
elegidas.
- El respeto y la promoción de los derechos de la persona humana enunciados
en la Declaración Universal, los pactos internacionales sobre los derechos
del hombre, la Convención Internacional contra la tortura y consagrada
por los textos legales.
- El respeto a la alternancia política a través del Sufragio Universal.
- El respeto a la legitimidad popular. Las instituciones libremente elegidas
no podrán ser eliminadas por otra forma que no sea la voluntad popular.
- La primacía de la Ley legítima.
- La garantía de las libertades fundamentales, individuales y colectivas,
la raza, el sexo, la confesión y la lengua.
- La consagración del multipartidismo.
- La no implicación de las Fuerzas Armadas en los asuntos políticos,
y el retorno a sus atribuciones constitucionales de salvaguardar la unidad y
la indivisibilidad del territorio nacional.
- Los elementos constitutivos de la personalidad argelina son el Islam, el arabismo
y el amazight (bereber).
- La separación de los poderes legislativo, ejecutivo y judicial.
- La libertad y el respeto a las diferentes confesiones.
Medidas necesarias antes de llevar a cabo las negociaciones:
- La liberación efectiva de los responsables del FIS y de todos los
detenidos políticos. Asegurar a los dirigentes del FIS las garantías
necesarias para poderse reunir libremente.
- La apertura del campo político y mediático. La anulación
de la decisión de disolución del FIS, y el total restablecimiento
de la actividad de todos los partidos.
- La suspensión de las medidas de intervención y suspensión
de diarios escritos y de libros, tomadas en aplicación del dispositivo
de excepción.
- El cese inmediato, efectivo y verificable de la práctica de la tortura.
- La paralización de la ejecución de penas capitales, de las ejecuciones
extrajudiciales y las represalias contra la población civil.
- La condena y el llamamiento al cese de las acciones y los atentados contra
los civiles, los extranjeros y la destrucción de los bienes públicos.
- La constitución de una comisión independiente para investigar
los actos de violencia y las graves violaciones de los Derechos del hombre.
El restablecimiento de la paz:
Una dinámica nueva para la paz implica un proceso gradual y simultáneo,
y necesita:
-por una parte, medidas de disminución de la tensión efectivas:
cierre de los campos de seguridad, el levantamiento del estado de emergencia
y la abrogación del dispositivo de excepción.
-por otra parte, un llamamiento urgente y sin ambigüedades para la finalización
de los enfrentamientos. Las argelinas y los argelinos aspiran a un retorno de
la paz civil. Las modalidades de aplicación de este compromiso serán
determinadas por las dos partes en conflicto y con la participación activa
del resto de partidos representativos. Esta dinámica exige la participación
plena de todos los partidos representativos y pacíficos. Su participación
será importante porque ayudarán a la adhesión de la población
El regreso a la legalidad constitucional:
Las partes firmantes se comprometen a respetar la Constitución del 23
de febrero de 1989. Sus enmiendas tendrán que respetar las vías
constitucionales.
El regreso de la soberanía popular:
Los partidos participantes en las negociaciones tendrán que definir
una legalidad transitoria para su postura en el trabajo y la vigilancia de los
acuerdos. Por eso, tendrán que presentarse en una Conferencia nacional,
dotada de competencias efectivas, compuesta por el poder efectivo y las fuerzas
políticas representativas. Esta Conferencia definirá:
-las estructuras transitorias, las modalidades
y la duración de un período de transición, lo más
corto posible para llegar a unas elecciones libres y pluralistas que permitan
al pueblo ejercer la plena soberanía.
-la libertad de información, el libre acceso a los medios y las
condiciones para la libre elección del pueblo tendrán que
ser garantizadas.
-el respeto a los resultados de esta elección también tendrá
que ser garantizado.
Garantías:
Todos los partidos participantes tienen el derecho de obtener garantías
mutuas. Los partidos, aunque mantienen su autonomía de decisión:
- Se oponen a toda injerencia en los asuntos internos
de Argelia.
- Denuncian la internalización de hecho, que es el resultado de la
política de enfrentamiento llevada a cabo por el poder.
- Están convencidos de que la solución de la crisis no puede
ser otra que el trabajo exclusivo de los argelinos y su concreción
en Argelia.
- Se comprometen a hacer una campaña de información para la
comunidad internacional para dar a conocer esta plataforma y asegurar su
apoyo.
- Deciden lanzar una petición internacional para apoyar la exigencia
de una solución política y pacífica en Argelia.
- Llaman a la comunidad internacional a una solidaridad activa con el pueblo
argelino.
- Deciden mantener los contactos entre ellos con el fin de llevar a cabo
consultas y una concertación permanente.
Por el LADDH: Abdennour Ali Yahyia
Por el FLN: Abdelhamid Mehri
Por el FFS: Hocine Aït Ahmed; Ahmed Djeddai
Por el FIS: Rabah Kebir; Anwar Haddam
Por el PT: Louisa Hanoune
Por el MDA: Ahmed Ben Bella; Khaled Bensmain
Por el Ennahda: Addallah Jaballah
Por el JMC: Ahmed Ben Mouhammed.